El director ejecutivo del Instituto Nacional de Yerba Mate (INYM), Nelson Dalcolmo, consideró errónea la interpretación que se hizo de la publicación en el Boletín Oficial que involucraba a esa institución en relación a la fijación de precio de la yerba mate. También hizo mención del consumo interno, las exportaciones y las importaciones.
“Lo que salió en el Boletín Oficial fue una anulación de laudos anteriores, en ningún momento habla de fijación de precios para adelante ni lo que compete a la Ley 25.564 en su decreto reglamentario que es sobre la fijación de precios semestrales”, aseguró Dalcolmo desestimando la información difundida al respecto.
Sí admitió que continúa presente la preocupación que tienen sobre “el efecto del gobierno nacional con respecto a la actividad yerbatera de desregular todas las actividades y el DNU 6023, que para nosotros no está vigente, donde dice que las facultades del INYM se limitarían”, y deslizó mantendrán esa postura “hasta que no esté reglamentado y pase por la Cámara de Diputados, porque en el Senado logramos que sea rechazado, y si es rechazado en Diputados quedará sin efecto”.
Indicó que el impacto que está teniendo las medidas adoptadas por el Gobierno Nacional se puede visualizar tomando en consideración que el año pasado precio de la yerba cerró a a 380 pesos el kilo al contado y, actualmente, apenas siete meses después, se está abonando “a 180 pesos y a plazo”, entonces, “este es el efecto negativo, una pérdida del 50 por ciento del valor y con una inflación del 90 por ciento” acumulados en este tiempo.
Importación, exportación y consumo:
Al ser consultado sobre estos ítems, Dalcolmo comento, en cuanto a las importaciones, que “veníamos con una alerta con respecto a materia prima que venía ingresando desde los países limítrofes, hoy no se está dando y prácticamente es cero el ingreso” aseveró.
En cuanto a la exportación, indicó que “venimos en aumento, con un 15 y un 6 por ciento, y ahora, el último registro, está cerrando en un 8 por ciento”, adelantó Dalcolmo, lo que significa casi un 30 por ciento de incremento en las ventas al exterior, mientras que “el consumo interno sigue estable”.
En este último punto explicó que existe una confusión en algunos sectores que informan sobre la caída del consumo al tomar “la caída de la salida de molino y no tiene nada que ver una cosa con otra, o sea, las cadenas comerciales se stockearon en demasía cuando se hablaba de un dólar a 3 mil o 4 mil pesos” y al suceder eso, “obviamente, dejaron de comprar yerba empaquetada a los molinos”.
Pero aseguró que esa situación comenzó a cambiar. “Gracias a Dios, a partir de julio, se está reactivando”, comentó.
Para concluir, contó que han venido manteniendo en los últimos días varias reuniones a nivel nacional con el objetivo de marcar la relevancia que tiene el INYM para la actividad yerbatera en su conjunto.
“Hay acciones, estamos haciendo continuamente, tratando de sostener y mantener nuestra institución INYM y demostrar con hechos que el Instituto es una herramienta para el productor y para la producción, y para toda la cadena”, explicó.