El equipo alemán se impuso 4-2 en el Hard Rock Stadium de Miami y avanzó a los cuartos de final del Mundial de Clubes.

Pulgar -en contra-, Harry Kane -por 2- y León Goretzka convirtieron los goles del equipo alemán, que pegó en los momentos justos y avanzó con relativa comodidad.

Bayern Múnich chocará en los cuartos de final ante PSG, que más temprano aplastó a Inter Miami en Atlanta.

El chileno Pulgar tuvo un partido para el olvido: gol en contra, amonestación y lesión, de aparente gravedad.

El equipo de Messi cayó por 4-0 ante su ex equipo en los octavos de final del Mundial de Clubes 2025.

LIONEL MESSI sufre en Atlanta una dura derrota con Inter Miami ante PSG por los octavos de final del Mundial de Clubes 2025, en un partido que fue inédito en su carrera, dado que por primera vez en su carrera disputó un partido oficial ante un ex equipo.

El picante cruce ya desde la previa despertó alta expectativa y se esperaba un estadio Mercedes-Benz Stadium colmado para ver al argentino, la figura de la MLS, ante el conjunto francés, el último campeón de Europa.

En el primer tiempo, el equipo de Luis Enrique no le dio respiro a las Garzas de Javier Mascherano y dominó desde el comienzo. A los 6 minutos, llegó el primer gol tras un tiro libre de Vitinha que João Neves cabeceó para abrir el marcador.

Después, todo fue al revés para Inter Miami. Noah Allen salió por una lesión e ingresó Tomás Avilés en su lugar. Hubo un gol anulado para PSG por offside, otra jugada salvada en la línea y tres goles más para ampliar la ventaja a un 4-0 parcial apabullante y asfixiante en favor del equipo parisino: Neves anotó su segundo tanto a los 38 minutos, Avilés marcó en contra y Achraf Hakimi convirtió el cuarto en el cierre de la etapa inicial.

El piloto argentino penó con la falta de potencial de su Alpine, encontró un buen ritmo tras su segunda parada, sufrió un golpe de Yuki Tsunoda y terminó sancionado por una maniobra con Oscar Piastri.

Franco Colapinto cerró nomás esa tan mentada quinta carrera con Alpine, la frontera que le había impuesto el equipo al momento de anunciarlo como reemplazante de Jack Doohan después del GP de Miami. Con la continuidad ya asegurada desde antes de comenzar la actividad del GP de Austria, 11ª cita del calendario, el piloto argentino vivió una verdadera montaña rusa durante la competencia.

Primero, le tocó volver a batallar con el flojo A525 de Alpine, un auto que está muy lejos de poder pensar, siquiera, en sumar puntos. En una carrera en la que hubo cuatro abandonos y en la que Pierre Gasly largaba desde el décimo cajón, la bandera de cuadros encontró a los autos de Enstone en el puesto 13º, con el francés, y 15º, a Colapinto. De hecho, con el octavo lugar de Gabriel Bortoleto en Spielberg, Franco es el único corredor de los 20 que integran la parrilla que no anotó en 2025.

Desde Alpine, según confesó Gasly en la previa, ya están pensando en el auto de 2026 (habrá nueva normativa técnica) y el coche que tienen ahora es el que tendrán hasta fin de año. “El problema es que tenemos que defendernos todo el tiempo”, dijo Franco antes de comenzar la competencia. Ante lo dicho por el francés, el camino seguirá siendo tortuoso y tal vez haya que esperar a una carrera revuelta por algún chaparrón o algo raro para pensar en meterse más arriba.

Franco comenzó en Austria con neumáticos blandos, estrategia con la que los ingenieros de Alpine intentaron paliar la desventaja que saben que tienen. Pero no funcionó. Después de la detención, a Franco le colocaron neumáticos medios y a Gasly, duros. Colapinto batalló con esas cubiertas, aunque en la vuelta 18 fue el piloto más rápido de todos. Pero no encontraba ritmo y, para colmo, recibió un golpazo de Yuki Tsuonda en la tercera curva. El japonés, cuyo puesto en Red Bull se está haciendo cada vez más insostenible (teniendo en cuenta la política que utiliza el equipo de Milton Keynes), se tiró por adentro, por donde no había espacio, y le pegó en la rueda trasera derecha. El argentino hizo un trompo completo y pudo seguir. Sin dudas, algún daño quedó en el A525.

Lo mejor del argentino fue en el stint con neumáticos duros. Giró consistentemente más rápido que Gasly. De hecho, la vuelta más veloz del argentino fue de 1m09s621, contra 1m10s151 del francés. Colapinto completó cinco vueltas por debajo de los 70 segundos. Su ritmo fue mejor que el de Gasly, quien en algún momento llegó a plantear al equipo la posibilidad de abandonar porque no podía llevar el auto por la pista. “Estoy cerca de hacer trompo en cada curva”, bramó el ex Alpha Tauri.