En diálogo con Canal 9 Norte Misionero, el cuñado de Andrea Villalba, Raúl Soma, contó que tanto él como su pareja, que es hermana de la mujer, la última vez que la vieron fue el domingo por la mañana, mientras se preparaban para ir a la casa de un familiar para celebrar el Día de la Madre.
Andrea estaba en la casa de Raúl, “preparando la leche para sus hijos”, pero en un momento determinado dice que se va a su casa, que está contigua, pero que regresa enseguida, sin embargo, no volvió. Al rato se le envía a la hija de Andrea, de 4 años, para buscarla, pero ya no está.
El hombre cuenta que entonces la comenzaron a buscar en las cercanías y luego ampliaron la búsqueda hacia otros sectores del barrio, pero sin encontrarla y sin que ningún vecino la haya visto.
Soma señaló que su cuñada se llevó una mochila conteniendo sus documentaciones y la de sus dos hijos, la nena de 4 años y un varón de 1 año, pero dejó al costado de la cama su celular.
Un dato que surgió luego de la desaparición, y que le dieron relevancia antes, fue que Andrea se mostró muy apática el domingo a tal punto que apenas respondió las salutaciones por la importante celebración que se vivía esa jornada.
La mujer, de 46 años, padece de ataque de pánico que se habría agudizado después de la muerte de su marido, ocurrido hace 5 meses, pero que, según su cuñado, era más frecuente a la noche, aunque deslizó que en los últimos días ya no quería estar sola ni siquiera de día en su casa y fue por esa razón que comenzó a quedarse más tiempo en la cada de su hermana y cuñado.
Soma comentó que Andrea Villalba había ido en una ocasión al médico por su problema, pero que luego no volvió a hacerlo, a pesar de la insistencia familiar. “Decía que estaba bien”, contó el hombre.
Al ser consultado si la mujer en algún momento pudo evidenciar alguna conducta suicida, Soma descartó esa chance y afirmó que nunca lo había intentado.
En cuanto al trabajo policial, Soma comentó que tras realizarse la denuncia se comenzó con el operativo de búsqueda en distintas zonas de la ciudad, aunque sin resultados positivos. Además. “dieron el alerta de búsqueda para toda la provincia”, comentó.

Esta tarde, un hombre identificado como Cristian Daniel Spicker de 23 años, que conducía una motocicleta Motomel 150cc falleció junto a su acompañante, Liliana Coinete de 22, en la ruta provincial 211, donde habría colisionado con un Volkswagen Bora al mando de una mujer de 39 años. Además, una beba que viajaba con la pareja se encuentra internada en estado de gravedad.

Según las primeras averiguaciones, todo sucedió cerca de las 16 horas en la arteria antes mencionada, donde por razones que se tratan de establecer se produjo la colisión. A raíz del mismo, el hombre y su acompañante fallecieron al acto, mientras que la beba que viajaba junto a los mismos, fue llevada de urgencia al Hospital Samic de Oberá donde permanece internada en estado grave.

En el lugar trabajaron los efectivos de la comisaría jurisdiccional, la Policía Científica y el médico policial. Por su parte, el Juzgado de Instrucción No 3 de San Vicente dispuso la entrega de los cuerpos y el secuestro de los rodados.

Esta tarde, agentes policiales interceptaron un camión cargado con hojas de yerba que, según las primeras investigaciones, habían sido sustraídas de la chacra de un colono. Los dos hombres fueron detenidos cuando intentaban vender el producto en una empresa ubicada en Oberá.

La intervención se llevó a cabo a las 16:00 horas, tras recibir un llamado al 911 que alertaba sobre la llegada de un camión con carga sospechosa en una empresa situada en Picada Sarmiento. Los efectivos se dirigieron rápidamente al lugar y tras obtener información de la Comisaría jurisdiccional confirmaron que la yerba había sido robada a un colono en la localidad de Los Helechos.

Por ello, los uniformados procedieron a detener al conductor, un hombre de 34 años, y a su acompañante de 25 años. En total, se secuestraron 40 bolsas que contenían aproximadamente 6 mil kilos de hojas verdes de yerba mate.

Finalmente los detenidos fueron trasladados a la comisaría jurisdiccional, donde quedaron a disposición de la Justicia. Además, lo secuestrado fue devuelto a su legítimo propietario, por disposición del magistrado interviniente.