La jornada futbolística del domingo en el Club Guaraní se vio empañado por la violencia, al finalizar el partido varios simpatizante de la Franja increparon a jugadores y cuerpo técnico de la Unión Cultural y Deportiva Eldorado (UCDE) que estaban en la zona de vestuario, a raíz del tumulto un jugador visitante tuvo que ser trasladado por una ambulancia al Hospital donde fue atendido por un traumatismo de tórax.

La postura adoptada por la dirigencia del Departamento de Fútbol del club del km 11 es avanzar hasta la últimas consecuencias contra el Club Guaraní, por tal motivo esta noche se presentará una nota en el tribunal de disciplina solicitando la sanción correspondiente, ayer mismo realizaron una denuncia penal contra el dueño de casa, mientras que el jugador agredido también realizará una denuncia penal en las próximas horas.

Durante la mañana de hoy Canal 9 Norte Misionero intentó escuchar a los protagonistas, por algún motivo u otro ninguno de los clubes involucrados salió a contar su versión de lo sucedido, en la tarde noche de ayer.

Lo cierto es que en redes sociales se vieron unos videos en el cual se observa a un grupo de hinchas de Guaraní intentando ingresar al salón utilizado como vestuario por el visitante, también desde adentro del salón se ven empujones y la intención de cerrar las puertas, que después terminaron con el vidrio roto.

Tras estos incidentes se requirió la presencia de una ambulancia para atender a German Rodríguez quien fue agredido, el padre del jugador también se expresó en redes sociales señalando que la barra brava de Guaraní agredió a su hijo que buscará justicia.

En la tarde de este lunes, el Club Unión Cultural sacó un comunicado prensa en el cual repudia los hechos de violencia y responsabilizan a la parcialidad del dueño de casa, además repudian la presencia de barras bravas en las cancha de Eldorado.

Desde el Club Guaraní solamente expresaron que buscan una compensación por los daños efectuados por la UCDE, pero no explicaron los motivos del incidente, algunas versiones dicen que la reacción se debió a la rotura de unas vitrinas del club. Sabiendo que nada justifica la violencia y que un jugador de fútbol termine internado, el club anfitrión no explicó nada.